lunes, 8 de noviembre de 2010

Hoja de té

Si la vida me insta a escribir en verso, escribiré de nuevo sobre el papel convexo de mi alma. He rechazado desde aquel entonces mostrar las letras que se esconden en el recoveco de la prosa de historias inventadas, de sueños de ser algo que aquí no me dejan ver, de despertar de un sueño entonando la frase «¡Papá, quiero ser poema (que no poeta)!», no encontrar cena en la mesa y antes de terminar, manchar un papel con palabras que hablen sobre el fondo del cristal y cerrar los ojos antes de dormirme, soñar ser algo que aquí no me dejan ser, siempre acompañada por mi vaso de té.

Por ti va ésto.

Hoja de té,
te rozo, me enconjo, te trago.
Hoja de té,
libiana por mi garganta.
Hoja de té,
son las notas de una canción desesperada, dormida,
dejada en reposo en un vaso vacío.
Hoja de té,
son horas de insomnio, de soledad sola
de náufrago perdido.
Hoja de té,
roja, verde, lila de arcoiris oscuro
que reposa en un frasco de lágrima aguada.
Son solo ganas de ser
un hilo que cuelga sobre el cristal
de trescientos sesenta y mojar
con simple atadura las hojas de té
que dejan tras la lluvia el extracto de mi locura.
Y una vez más
te rozo, me encojo y te trago, hoja de té.

viernes, 8 de octubre de 2010

Cursor Aydan

DromnearthLa habitación parecía estar congelada y no podía conciliar el sueño, ¿o si? podría pensar que todo hubiese sido un sueño de no ser porque, en cierto modo, sabía que él siempre había estado ahí, tras la puerta, vigilándome y cuidando de mi en este mundo tan alejado de toda cosa perceptible por mi mente.

Cada vez que tenía un mal sueño, que las cosas iban mal, cada vez que estaba sola en la noche de mi habitación, ahí estaba él, camuflado entre las sombras. Sin embargo, fue esa noche, cuando supe que todo este tiempo había sido él, pues de haberlo sabido antes no habría pasado los años de mi infancia llamando a gritos a mi madre terrestre cada vez que aparecía.

Ya entrada mi singular adolescencia, en este mundo, durante una madrugada de otoño, un frío terrible inundaba la habitación, mientras jugaba con el vaho que salía de mi boca, mis lágrimas, anhelantes de volver a su hogar, ese hogar que de algún modo sabía que existía y que no era donde estaba, seguramente se hubiesen congelado de no ser porque allí estaba él una vez más.

Con los ojos cerrados, casi rendidos por el cansancio, noté cómo una mata de pelo rozaba mi mejilla suavemente. No hice caso alguno hasta que algo sobre mi cuerpo se acercó y me abrió los ojos con una especie de energía que penetró por todo mi cuerpo. Tonta de mi, me fue imposible pronunciar palabra, aunque tampoco hizo falta hacerlo.

Allí estaba, después de tantos años sin saber de él.

Su mata de pelo plateado me cubría la cara y no pude evitar ruborizarme cuando su nariz rozó la mía y me vi en sus profundos ojos azules, puedo decir que incluso me excitó pero no de esa manera en que las personas de este lugar se excitan. Subí al cielo, pegué un mordisco a la luna, di ocho mil vueltas a lo que ahora se que es el espacio 475H6 y caí en un estado entre un coma y la muerte. No sabía si mi cuerpo ardía o me estaba congelando por completo. No podía moverme.

Él se irguió y pude apreciar mejor su rostro, ese que había estado oculto todos estos años por la oscuridad que creaba mi mente vedada. Era lo más hermoso que había visto jamás...
Extendió su brazo hacia mi y quitándose el púrpúreo guante hecho de algún material cósmico que cubría su mano, abrió ésta invitándome a...

- Hola, me llamo Aydan y he venido a llevarte a un mundo nuevo.

Alargué el brazo...y volé.

miércoles, 15 de septiembre de 2010

Comunicación y arte mudo: una simple teoría.

La comunicación oral ha ocupado un papel esencial a lo largo de la historia de la humanidad. Efectivamente y como bien he dicho, ha ocupado, pues en la actualidad la comunicación se ha convertido en el juguete predilecto para gobernar, a capricho, a la masa y lo peor de todo, los jugadores. Cualquiera, grande, pequeño, con dos dedos de frente o con ninguno, es capaz de mover al "pueblo" con unas pocas palabras mediocres (o no).

Hoy por hoy y desgraciadamente, no es ninguna mentira que nadie lee, y hasta hace poco yo misma podría meterme en ese mismo saco. No me refiero al "best seller" del año, no, me refiero a LEER. Nadie escucha, y aclaro, una cosa es oir y otra muy diferente escuchar, creo que a estas alturas cualquier persona es capaz de dar cuenta de ésto. Nadie observa, que no mirar. Y así, señoras, señores, la comunicación oral actual en este país es la gominola del titiritero. Un titiritero que bien puede ser un juez, un alcalde corrupto o Belén Estéban.

Vivimos en un país en el que la gente que tiene que hablar ya no sale a la calle, la gente ya no opina, ya no discrepa, no ofrece salidas alternativas a la norma. Vivimos en un país en el que los pocos que deben alzar la voz, no lo hacen ya sea por temor o por indiferencia. Dejamos que nos mangonéen, que nos digan lo que queremos oir (lo que nos hacen creer que queremos oir) y lo peor es que CUALQUIERA puede hacerlo.

¿La solución? Todos mudos. Demasiadas voces en exceso solo crean ruido. Ruido es lo que sobra en el mundo.

Que solo los que realmente tienen algo que expresar, lo hicieran, sin voces, a través del arte (y no lo que entendemos y consideramos actualmente por "arte"). La pintura, escultura, fotografía, la música, el teatro, la lectura...todos y cada uno en todas sus variantes. No necesitamos voces vacías, pues ya es sobrado decir la célebre frase de "Vale más una imagen que mil palabras".

¡CULTURA! señores, es lo que hace falta en este país. La cultura no es cara, la cultura es libre digan lo que digan, se ha convertido en una cultura de masas, está en la calle, no en la televisión en el programa de AR, está en cualquier esquina de su calle, esa persona que hace caricaturas, esa que vende poesías, esa que hace juegos malabares y dibuja sonrisas, en una proyección de cine cultural, en una manifestación estudiantil...¡SI! ¡estudiantes españoles, no estáis muertos! no dejemos que nos apaleen como a mulos, que nos ordenen como a borregos.

Mudos, todos mudos, y que solo aquellos que de verdad tienen algo que decir puedan decirlo, para aquellos que entienden y quieren entender (y hacer entender) lo que se quiere expresar pudieran hacerlo.

En una sociedad comunicativa en la que sobran voces que no comunican, solo dejaría con voz a algún que otro juglar (y no monos disfrazados).

http://www.youtube.com/v/KPy-gDpzni4

Cristina Martín Bachiller.

sábado, 11 de septiembre de 2010

Cuentos de Tavern III


6:00. El sol iluminaba el único camino que permitía la entrada a la plaza principal del pueblecito y entraba a regañadientes por la ventana creando infinidad de sombras rojizas que se proyectaban en la cara de Sirlú. Parecía que le habían estampado un tomate en la cara o que estaba teniendo sueños bastante agradables...se oyó un bocinado desde la calle.

El hombrecillo del día anterior acababa de aparcar una especie de vehículo extraño frente a la puerta de la tabernay asomaba medio cuerpo por la ventanilla.

- ¡¡¡ERRRRRIIIIIIC!!!

Sirlú casi rozó el techo del brinco que dió sobre la cama pero por suerte una estantería metálica frenó su cabeza antes de llegar. Se apróximo a rastras como pudo hacia la ventana.

- ¡¡¡QUE AQUÍ NO HAY NINGÚN ERIC OSTIE!!! VÁYASE A MOLESTAR A OTR...¿qué demonios es ese trasto? - dijo refiriéndose al vehículo.

- ¡¡¡ES MI BUEN AMIGO L.E.D. 478, VERSIÓN EN REVISIÓN NÚMERO 6!!!

- Ahm ¿y qué hace exáctamente?

- ¿¡¿ QUÉ?!?

Sirlú le hizo un gesto haciendo referencia al sombrero gigante. No era el típico sombrero que se podría esperar de un cazarecompensas como aquel, era más bien un sombrero que se pondría cualquier bruja chiflada para decir ¡patacabrón! y seguidamente hacer aparecer, o bien una pata de cabra con posible utilización culinaria, o bien un hijo de puta más en el mundo.

- Entra que creo que huelo a tostadas...

- Yo creo que Alopher ha vuelto a quemar la cocina intentando hacer "magia".

¡¡¡BOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOM!!!

La taberna voló...lejos.

Ahora Sirlú parecía más bien uno de los curritos que salían en la etiqueta de cocacao y aquel hombrecillo había desaparecido. Alopher permanecía inmóvil con una expresión la mar de expresiva, con un delantal naranja y rosa y sosteniendo en una mano los restos de un libro y en la otra un cazo enorme...el mango de un cazo enorme.

- Peroooooooooo...

- ¡YO NO HE SIDO! ¡YO NO HE SIDOOOOOOLOLOLOL!

- ... ... ...

- ¿¡¡Qué has hecho?!!

- ¡YO NO HE HECHO NADA! ¡NO HE HECHO NADALALALALALAL!

El jovencito estaba al borde de un ataque.

- Bueno, bueno tranquilízate...¡qué ostias! ¡ahora van a saber dónde estoy! ¡maldito crio! ¿y dónde se ha metido el canijo?

- ... ... ...

- Creo que...¿qué vamos a hacer ahora con la recompensa? no sabemos ni lo que tenemos que hacer, ni dónde...

- Buah, lo típico chico, rescatar a la princesa de turno que está encerrada en un castillo con un foso lleno de lava hirviendo y un dragón custodiándolo y devolverla a su reino...¡casi seguro! parece que naciste ayer.

- De hecho...ayer fue mi cump...

- Le tomé prestado anoche, cuando colgué su capa en el perchero, un pergamino que llevaba bien guardadito, era un mapa de Aina.

- Lo guardaría por algo ¿no crees?

- ¿Porque es un tío raro? lo que sé por mis extensos estudios avalados por años y años de completa indiferencia, Aina es solo producto de la maravillosa mente ensoñadora de algún monje chiflado. ¿Acaso no lees nada?

- Soy más de jugar a las tabas.

-Pues vaya.

- El caso ¡eso es robar! y encima ¡para nada!

- To-Maaá-r pRes-táaa-dd-òoo - dijo haciendo gala de su nuevo y revolucionario lenguaje que algún día se hablaría en todo la tierra y el aire, y el mar, y quien sabe quizás en la estratosfera, pero eso ya era demasiado pedir.

-..carái...su sombrero...y...buf...cuando vuelva mi padre se va a armar pero bien...-dijo el jóven lloriqueando.

- Se lo guardaré un ratito y tranquilo, te guardo también el secreto...¡mira!

- Peee... - Alopher giró la cabeza bruscamente.

- ......................................................AAAAADDDDiiioooos............

- ¡EH! ¡ESPERA! ¡VOY CONTIGO!

- ¡Solo si consigues alcanzarme enano!

martes, 17 de agosto de 2010

The way (Part 1)


Un camino angosto y húmedo, absolutamente alejado a todo aquello que se conoce como Ire Nesrum o fin nuestro, se enfrentaba ante sus ojos, desafiante, inpenetrable...pero sus ganas de volver a toda costa y para no volver, aunque fuese por el camino peor marcado, superaban cualquier pensamiento de marcha atrás.


La pequeña abertura situada más allá de la localidad o “locuridad” de Downtown, en los ya invisitables acantilados de Arsiense, se tornaba grandiosa ante sus ojos. Había esperado mucho ese momento, había removido tierra, agua y cielo, el de aquí y el de donde ya sabéis. Aydan lo conocía muy bien, se pasaba días, años, milenios sentado en su sillón celeste tocandose las...narices mientras observaba los increíbles procesos que se sucedían en su pequeño terrario.


En efecto, allí estaba dispuesta a comenzar su viaje de vuelta a casa. Sabía que no iba para quedarse, pensaba que jamás iría para quedarse pero le reconfortaba enormemente que le permitiesen beber H2O pura, repirar aire libre de gases tóxicos y montarse unas juergas con sus amigos de siempre un par de veces al año. Solo que esta vez iba por su cuenta, por el camino que sin duda conducía a Ulhä pero sobre el que trataban milenarias leyendas y escritos sobre su difurcación hacia la tierra prometida, Aina, desaparecida bajo las cenizas provocadas por el egoísmo de unos pocos, algunos de ellos ya ejecutados, otros desaparecidos cuyas cabezas serían expuestas cómodamente en la plazoleta del templo de la ciudad algún día.



Ayle sacó un mapa de la mochila, Tsérof tomó el control y lo tiró al acantilado.


  • ¡¿Se puede saber qué coño haces?!

  • No iba a servir de mucho, lo divertido de este camino es que para llegar no tienes que intentar llegar a ninguna parte.


Se adentró en la mohosa cueva. Olía más a podrido y rancio que aquella pequeña taberna de cierta pequeña aldea que seguro podéis recordar sin problema. Por el suelo corrían hileras de agua que se precipitaban al vacío hacia la luz de la entrada, fue entonces cuando se alegró de haber tomado prestadas las roñosas botas de lluvia de aquel comerciante semiebrio. Se adentró sin temor alguno, aquello le resultaba tan familiar y acojedor que podría haberse acurrucado en cualquier rincón y quedarse dormida. Mucho mejor que en su cama habitual desde luego.


Según iba avanzando el ambiente se notaba más cargado. Gotitas que caían de las estalactitas colocadas caprichosamente golpeaban su cabeza a su paso. Sería muy posible que saliese de allí con un gran cuerno de arena sobresaliendo de su cuero cabelludo.


  • ¡Au! esa era gorda, me van a terminar haciendo un agujero...


  • Joder qué calor...


  • ...qué hambre...


  • ...y qué cansancio de andar...


  • Pero si tú no andas nada pedazo de vago


  • Era una ironía...


  • Tsérof y sus irontseradas.


  • Blue y sus gilipolleces.


  • Chicos, calma que aún queda mucho camino...



Según iban avanzando la presión y el calor se hacían cada vez más insoportables. Llevaban varias horas andando, posiblemente días pero en aquel lugar el espacio-tiempo dejaba de existir para dar paso al casancio y la incertidumbre.

  • No se si Ayle podrá aguantar mucho más.


  • ¡Dale caña nena!


  • La cosa no está para bromas Blue. Yo personalmente quiero llegar con un cuerpo, a ser posible en un estado decente en el que poder residir durante la estancia.


  • Yo personalmente le he cogido ya mucho cariño a este cuerpo...


  • Tsérof, esas manos.


  • ¡Estrecha! Sniff sniff...


  • Gilipollas.


  • ¿Pero a éste qué le habéis dado?


  • Nada, debe ser el estar demasiado tiempo hablando con los árboles...ya sabes lo que dicen...eso de que...


  • ¡Que te estoy oyendo!



Ayle cayó rendida en el suelo. ¿Qué le puedes pedir a un cuerpo humano cuando llevas alimentándolo casi tres días a base de agua caliente y manzanas?


  • Deberíamos parar a descansar un poco.


  • Creo que aquí ya se ha tomado la decisión.


  • ¿No me digas?


  • Bah, Zúrie, pásame una manzana del macuto, por favor.


  • ¿El qué?


  • No...


  • Si.


  • ¡JODER! ¿quien ha sido?


  • Creo que Blue se comió la última hace unas 4 horas, cuando pasábamos por...


  • No me refería a eso...dios santo, huele a muerto, puag...


  • ¡Ni se te ocurra vomitar ahora!


  • Es el azufre, debemos estar a kilómetros de la superficie.


  • ¡Arrancadme la nariz!


  • Tsssssssssssss ¿habéis oido eso?


  • Oh mierda, no me apetece nada tener que cargarme ahora a una araña gigante, un murciélago gigante o esos bichos asquerosos y gigantes que habitan en las cuevas...

  • ¡Un Golbat salvaje apareció!

  • No estoy para bromas Blue...

Zúrie no podía evitar reir a carcajada limpia.


  • ¡Zúrie!


  • Si, si...ay...ya...ay...uf...


  • Mirad, allí en frente hay un recobeco, hay que ocultar a Ayle si queremos salir por su propio pie.


Rápidamente entre los tres arrastraron a Ayle hasta un pequeño cubículo. Era una pequeña entrada sellada con una puertecita de acero llena de garabatos en algún lenguaje antiguo...o algo así.

  • Tenemos que llegar como sea...



jueves, 17 de junio de 2010

Cuentos de Tavern II


- ¡¡¡Eriiiiiiiic!!! ¿¡Dónde andas maldito bastardo!?

...

Se hizo el silencio. El eje del mundo se detuvo durante una porción de segundo, una porción que parecía eterna, y hubiese jurado que en algún lugar del universo conocido, desde la zona Y hasta el sureste de Mandöla, alguien dejó de respirar para volverse y estampar su cabeza contra el suelo.

Un hombrecillo, que no llegaría ni al metro cincuenta subido en un taburete, pelo azabache enmarañado y brillante cual diamante pulido, o más bien, cual papiro bañado en aceite sobrante de haber frito pescado pasado, acababa de atravesar las puertas del acogedor infierno tavernés gritando como un poseso.

Sus ojos eran una mezcla curiosa de locura, ira y frenesí frenético que cualquiera de los visitantantes indefinidos de esos lugares oscuros llamados "loquicorios", o así me dijo el viejo loco Krothen que se llamaban...aunque ahora que lo pienso...no era el más indicado para responderme...en definitiva, cualquiera de esa panda de libres conejos saltarines descabellados hubiese deseado poseer para dar más credibilidad a su estado.

A pesar de su aspecto desaliñado: pantalones negros anchos y algo remendados, botines de piel de Knut con restos de lo que alguna vez fue una suela, camisa de lazo blan...lo que parecía haber sido blanco, cinturón lleno de arsenal y sombrero de ala ancha que ocupaba más que su cuerpo, se podría decir que era lo menos esperpento con lo que Sirlù se había topado en lo poco que llevaba su estancia en el pueblucho.

- ¿Eric?

- Señor, creo que se ha confundido, aquí no hay ningún Er...-soltó el bufón tirando por la borda todo el complejo proceso que el universo había experimentado.

-¡¡¡¿ERIIIIIIIC?!!!

- Eric es mi padre -dijo el crio refiriéndose a Sirlú sin apartar la mirada del hombrecillo -¡HA SALIDO, NO ESTÁ! ¡¡VUELVA MÁS TARDEEEE!!

- ¿LO QUÉ?

-¡¡¡QUE NO ESTÁ!!!

-¡¡¡GILITOSTÁ TÚ CRIAJO!!!

El joven negó varias veces con la cabeza cuando vió a Sirlú a punto de estallar en una carcajada que dejaría más sordo aún al "invitado".

- Déjame a mi...- soltó Sirlú como pudo, intentando guardar la compostura, se remangó y puso en práctica un idioma gesticular que llevaba tiempo perfeccionando, sería una grosería intentar describir tales gestos, asi que dejo al lector libre de imaginarlas, Sirlú prosiguió - ...Mi bu -en señoòOr, el tal E - ric al que llama a plen - oo pulmó - n no se encu - entr - a en este mom - ento en esta ha - bit -ación y d -udo mucho que po -rrr que grit - Ée más consiga alg- o, a parte de moles- tÁr a la vecíííind - adz...

El hobrecillo se había quitado el enorme sombrero y se quedó mirando al poetilla como quien mira a un perro a punto de echar la comida ingerida por el único lugar posible tras el maravilloso y complejo proceso de la digestión.

- El sombrero me tapaba los oidos imbécil.

La cara del poeta era un poema.

- Niño - refiriéndose a Alopher - ¿sabes cuándo volverá tu padre? tengo sabrosas noticas de Zainah, bueno sabrosas si cambias la recompensa por buñuelitos de Nae...

-Buñuelitos de Nae...- Sirlú no pudo evitar derramar una lagrimilla, llevaba más de tres días masticando oxígeno con aroma a hez de caballo-...un momento, ¿has dicho recompensa?.

-Recompensa he dicho, con la que podrías comer buñuelillos durante el resto de tu vida, de la del crio y sobrar para tu descendencia si es que no evito antes que exista. Necesito un escudero.

-¿Y de qué va exáctamente...ese trabajillo...? ¡Anda, un coletero! - se recogió el pelo - yo soy tu hombre - dijo iluminándose cual santa aparición.

Imagen: Os presentó a Sirlú, bufón de locos y cuerdos, tan solo un poeta...y protagonista loco de esta historia sin pies ni cabeza. (posiblemente esa es la cara que se le quedó tras su maravillosa intervención en Sirlunés)

martes, 15 de junio de 2010

Interrupción


Ziën - Te lo dije.

Zùrie - ¿Tú otra vez? ya te daba por muerto, llevabas una temporada sin aparecerte.

Ziën - ¿Y Blue? ¿y Tsérof?

Zùrie - No se, por ahí andarán. Blue estaba un poco rara, no paraba de andar de un sitio a otro con su armónica pero no se decidía a tocar nada, y Tsérof lleva toda la semana con la mirada perdida...no es un buen momento...

Ziën - ¿Y tú qué?

Zùrie - Yo estaba tirándome de los pelos hasta que has llegado y me he quedado calva directamente.

Ziën - Jajaja ¡te lo dije! ¿o no? Nunca me equivoco y aún así os empeñáis en desprecierme y en darme la espalda una y otra vez.

Zùrie - Porque solo traes desgracias...¡déjame en paz imbécil!

Ziën - ...y sin embargo, hoy te pusiste esa camisa...ya veo...si hasta has traido los papeles que ibas a dar...

Zùrie - Yo...

Ziën - Tú y tu buena fé. Ya ves para lo que te sir...

Zùrie - ¡Lárgate! bastante tengo ya como para estar aguantándote.

Ziën - Vente conmigo a la ciudad, no se está tan mal...en serio.

Zùrie - ¡Que te vayas!

Ziën - Ayle no tiene más que hacer aquí. Blue lo sabe y se frustra y Tsérof simplemente pasa de todo, mientras tenga sus cuerdas y sus flautas le importa una mierda el resto del universo...y tú... parece que te has ablandado. Eres quien más tiempo lleva en este cuerpo después de mi, yo sigo igual de hijo de puta que en los comienzos y sin embargo tú...mírate...¡me das pena! no tienes fuerza ni para sostenerte a ti misma. Nos hemos topado con un muro bien hecho, con buenos cimientos y algo puñetero ¿para qué seguir molestándose en intentar atravesarlo? déjalo estar...

Zùrie - ...que te den por culo Ziën, déjame estudiar...¿Blue? ¿me puedes traer otro té? anda...

Blue - Es el sexto que te tomas hoy...no deberías...mira tus manos, apenas tienes pulso y te va a dar algo...

Ziën - ¿Y a esta qué le ha dado ahora preocupándose? ¡tráele el té a la muchacha, hombre!

Blue - Tú, cierra la boca gilipollas.

Zùrie - Calláos de una puñetera vez...quiero estudiar malditos hijos de puta...

Ziën - Vale, vale...ya nos vamos, nos vamos - dijo empujando por la puerta a Blue sin amabilidad ninguna.

La puerta se cerró tras ellos y Zùrie tomando entre sus temblorosas manos su brújula del tiempo rompió a llorar cual cría de 14 años...

Zùrie - Calláos...por favor.

miércoles, 9 de junio de 2010

Cuentos de Tavern


¡BUENOS DÍAS NIÑOS Y NIÑAS, VIEJOS Y VIEJAS, LEPROSOS Y LEPROSAS Y DEMÁS GENTES DEL PUEBLO LLANO! ¡Os traigo las historias más fascinantes jamás contadas por estos lares! ¡desde las tierras más exóticas y lejanas, desde los mares del norte hasta Tuntelú! ¡cuentos, chismes, mentiras, dejad hueco porque ha llegado Sirlú, bufón de locos y cuerdos, tan solo un poeta...¡HOMERO! envidia me tendría de no estar muerto...

-Tú, ven aquí, los papeles.

-Verá agente, los únicos papeles que llevo encima son el resultado de una mezcla de agua y madera de encina, tintados con la más exquisita tinta china en los cuales apunto ideas, pareados con arte y buena caligrafía...ah si, y papel para limpiarme el cu...

- ¡¿Te estás quedando conmigo bufón de pacotilla, hijo de tu santa madre?! ¡los papeles he dicho!

- Mi madre santa, lo que se dice santa...¡¡¡SANTA MARÍA DE DIOS!!! ¡¡¡MIRE!!!

Señalando hacia un punto entre el bullicio del mercado, antes de que pudiera darse cuenta, había puesto pies en polvorosa o más bien, sobre excrementos de caballo que era lo que más abundaba en la plaza de aquel jodido pueblo. Era época de cosecha, por consiguiente feria mercantil, y por tanto, burros, mulas, vacas, gansos y más "burros" abarrotando la calle principal que no destacaba por su corte ancho precisamente. Le dolían mucho los pies, le ardían, había estado caminando toda la mañana, tras cuatro días a caballo sin patas y otros dos en el carromato de Andrés...pero ahí estaba, viviendo, sobreviviendo en otro pueblo más al que contar sus chismes a cambio de un mendrugo o una palmadita en la espalda...o la sonrisa de un niño.

-Hola.

- ¿Me hablas a mi?

- Si, ¿eres el payaso de mi cumpleaños? -dirigiéndose a otro niño- ¿ves? ¡te dije que mi padre contrataría a un payaso en mi cumpleaños! y tú no me creías.

- Oye niño ¿me ves acaso cara de payaso? -dijo Sirlú frustrado.

- ¿No te ha contratado mi padre?

- No, yo no trabajo para nadie, bueno si, para el cielo y su aire, para el vino y su arte, para...¡soy poeta niño!

- Pues mira que yo te veo más...

Adelantándose a que el jovenzuelo terminase la frase -No tengo tiempo para tonterías, quitate de en medio, ¡me persigue la ley! impuesta por el noble y... ... ¡noble de tu rey!...

-...haciendo malabares...

- ¡Buena rima! y si, también se hacer malabares....ahora si me disculpas...

- Conozco un sitio donde puedes esconderte...

-Tengo que irm...¡habla por tu vida!

- Una posada no muy lejos de aquí...pero que dudo que ese agente noble y siervo de la ley entre, todos los que entran no salen muy enteros, pero creo que con las pintas que llevas no pondrán ninguna pega en que entres y si vas conmigo aún menos, que ya me conocen, mi padre es el dueño y hace el mejor cabrito que hayas comido jamás...

- Niño...que he estado en Tuntelú y en Shirlya...y en los mares del norte...he comido los mejores manjares...(grgrrrrr)...pero de eso hace mucho...mis tripas...¡llévame corre!

El niño cogió su mano reseca y ennegrecida del viaje y tiró de él guiándole entre la multitud. El pequeño tenía cierta habilidad para colarse entre la gente y pasar por debajo de las piernas de alguna moza...pero no recordaba que llevaba consigo un lastre con una embergadura algo mayor que él.

"¡Idiota! ¡mira por dónde vas!"

"¡Soplagaitas! ¿buscas pelea o qué?"

"¡¡¡Socorro!!! ¡un violador! ¡cochino! ¡¡no me toques!!

- Con esa cara no creo que te miren ni aunque fueses al circo...

"¡Imbécil! ¡¡¡desgraciado!!! ¡¡¡mal nacido!!!"

...

- Ya hemos llegado.

Efectivamente, los dos esperpentos habían llegado a lo que parecía una taberna marinera. En la fachada colgaba un cartel mohoso y carcomido en el que podían apreciarse unas letras grandes talladas en el propio tablón y unas más pequeñas justo debajo escritas con tinta roja o al menos es lo que Sirlú quería pensar. "Wandering Irish, o bebes o te largas y por supuesto pagas", un título muy noble y digno para cualquier posada de mala muerte, sin embargo Sirlú no pudo evitar desplear una sonora carcajada.

-¡JA! asi que este es la famosa taberna de tu padre, muy bien, ya puedes largarte.

- ¿Y qué recibo yo a cambio por haberte traido hasta aquí y haberte salvado de una muy probable ejecución en plena calle?

- Los buenos días, ah si y feliz cumpleaños, ya puedes...

- Mi padre es el dueño de la posada y no creo que le haga gracia que entre a su bar un "agente disfrazado de bufón para pillar cacho..." -soltó el niño con cierto retintineo.

- Sabes jugar criajo...me has caido bien ¿cómo te llamas?

- Alopher, señor.

-Mira Alopher, no puedo pagarte con dinero, ni pan, ni credo, pero puedo proponerte un juego, el cual no es difícil ni supone esfuerzo, se llama "Vamos a escuchar al gilipollas de turno contar las viejas historias de los lugares más lejanos, llenas de sabiduría y saber estar en un ambiente dejado, con un laúd y un jarro, al que por supuesto, invitas tú..."

-Está bien, está bien, entremos.

Una vez atravesaron las mismísimas puertas del averno, para la sorpresa de Sirlú, se encontraron con una sala bastante agradable para lo que venía a ser costumbre. Una serie de mesas redondas de madera rajada oscura se disponían en orden aleatorio por toda la estancia, las paredes desprendían un agradable olor a océano y pino, era como estar en un montaña marina, como las que había visitado antaño en Haispesh y sobre las que había bajado rondando posiblemente huyendo de cualquier ser racional o no, dispuesto a destriparlo; al fondo, una barra ancha, de madera más clara con un montón de jarras de madera descansando sobre ella, dispuestas a ser llenadas y/u ordenadas por orden anstranético. La sala parecía vacía.

- Mi padre suele salir a esta hora para hacer los recados. Siéntate donde quieras.

- ¿Me sirves una de esas fresquita?

- Las palabras mágicas...

-¡Dóbitu jalinquis jo!

- Haré como que eso significa "por favor" en espingreto.

Alopher llenó cuidadosamente una de las jarras dispuestas en la barra con un poquito de secamieles, la bebida típica de la zona, y se la ofreció al viajero, el cual se encargaría de derramarla por su garganta, barbilla y vestimenta incljuidas.

- Antes me dijiste que sabías hacer malabares.

- Gfrfrgg glubblbg lbs¡zí!

- ¿Me lo demuestras?

- No necesito demostrar nada más que mi inocencia, por cierto, no le digas a nadie dónde estoy...

- Si, si...pero toma, haz malabares o me chivo...

- Criajo de los...

El joven le ofreción al asqueado bufón 3 naranjas arrugadas para que hiciese su fabuloso juego.

- ¡Tienen moho! ¡¿cuánto tiempo llevan estas naranjas ahí?! ¡qué asco joder!

- Ajo y agua, y como vuelvas a decir un taco en el bar de mi padre hago que te las comas. ¡Venga! ¡quiero ver lo maravilloso que eres!

Con la expresión más ceracna a la repugnancia que puede aparecer sobre un rostro humano o "semihumano" Sirlú hizo la demostración.

- ¡Bien! ¡bien! ¿me ensañarás a hacerlo?

- Si, ¿por qué no? -dijo resignándose- total, creo que me voy a quedar aquí una temporadita hasta que se calmen las cosas...

- ¿Estás huyendo de algo más a parte de la guardia?

- Huyo de todo, de mi pasado, de ese agente, de la vida, huyo, es lo que mejor se me da hacer, salir por piernas.

-Pero esta vez te quedarás ¿verdad?

El rostro del niño se iluminó de manera sobrenatural, sus ojos se abrían y cerraban a una velocidad pasmosa, sus pestañas parecían abanicos reales de la lejana Denwon. Nadie podría decir "no" ante esa cara endiablada.

- ¿Otra jarrita?

- ¿Y a cambio?

- Un cuento para irse a la cama.

- Dejémoslo en un cuento.

Sin prestar atención a estas últimas palabras, Sirlú se dispuso a comenzar su relato, el último que había recogido en su papel del cu...¡escrita con esa tinta maravillosa traída de Denwon! Era el ambiente perfecto, la bebida perfecta, el olor perfecto y el niño adecuado, o al menos el niño dispuesto a escuchar.

lunes, 7 de junio de 2010

La canción del mar


Donde vaya el viento
irá mi soledad,
donde grite el mar.

Ahoga la lágrima
que dejó caer,
ahoga la verdad.

Ese extraño lugar
donde muere el dolor
y se desgarra...

Si sopla el viento en contra
y dejan de mecerte las olas,
no pienses más, sueña,
te arropará el lamento del mar
allá donde vayas.

Donde se remontan
los viejos relatos
donde se guardan...

Mas ahora muere en mis brazos
todo deseo de libertad,
encoge mi alma.

Donde el frío
es puro hielo,
donde nací y donde muero,
donde entona el viento,
allí, donde aún espero...

Mira el horizonte,
la costa al nacer,
mira para ver...

Donde vuelan las aves
arriarán mis velas,
donde todo es creer, ¡es poder!

Ese extraño lugar
donde muere la avaricia
y se derrama, se desarma...

Si giras antes el timón,
tornas el rumbo hacia la nada...
no esperes más, vuela,
te arropará el lamento del mar
allá donde vayas.

Donde aniquila al tiempo
el aire que se respira,
donde acaba tu desdicha,
en ese lugar...
donde el humo es viento,
allí espero, mi libertad.


Toss The Feathers, sonando.

domingo, 18 de abril de 2010

2001


- Ven, siéntate. Hoy voy a contarte una historia que aconteció sobre estas mismísimas purpúreas colinas y que...

- ¡Jo! qué rollo, ¡yo quería una de piratas o de caballeros!

- Jajaja otro día pequeño, recuérdamelo. Toma, antes de que comience con mi relato - y le ofreció al muchacho un trocito de regaliz rojo-.

El jovencito se sentó sobre el pie cortado de un ancho roble, frente a su mentor, y clavando los codos en sus rodillas y apoyando su cabecita entre sus manos se dispuso, sin mucha gana, a escuchar.

A Krothen no se le daba muy bien contar historias y al trasto de Aloph, escuchar, sin embargo, el resto hacia mágicas aquellas tardes en las que se reunian maestro y aprendiz. Los caballeros, piratas, mundos infinitos, seres que sobrepasan los límites de la imaginación y colinas mucho más verdes y extensas que aquellas sobre las que rodaba y corría a diario, parecían cobrar vida a través de las palabras de Krothen.

- Érase una vez...

- Krothy, ¿por qué todas las historias comienzan igual?

- Ese es un tema que dejaremos para otro día, hoy nos espera una tarde muy larga. Aún así, lo importante de las historias no es cómo empiezan, sino cómo terminan y esta no tiene final, por el momento. Así pues... -se aclaró la garganta- ...comienzo.

Has oido hablar alguna vez de Blue supongo...

- He escuchado a Aydan hablar de ella alguna vez pero no ha querido contarme nunca nada.

Aydan, no podría ser otro, sucio mentiroso, traidor...no te creas sus historias, ¿qué es lo que has oido sobre ella?

- Poco escuché, tan solo algo sobre el corazón de Ainha, sobre buscar al traidor de su hermano y regresar a casa...

Aquí el único traidor es en soplagaitas de Aydan. Te contaré la verdadera historia si prometes no contársela nadie por el momento a menos que te diga lo contrario...¿trato?

- Vale, ¿sellamos el trato con otro regaliz?

No sabes nada...toma anda. Blue Dromne fue en un tiempo una muchacha tan avispada como tú y también se pasaba tardes enteras escuchando mis "rollazos" como tú dices, bajo este roble.

- ¿Tú la conociste en persona?

Tal cual te veo a ti, me parece estar viéndola en tus ojitos acristados y en tus cabellos dorados y enmarañados...hace eones que no la veo y cada día que pasa me olvido un poquito más de su infantil rostro y de la fuerza oculta tras él. El maldito Aydan, si alguien me escucha, ¡que le quemen vivo de una vez! grandísimo hijo de...humhum...perdón, como iba diciendo, Blue era una muchacha como otra cualquiera pero tenía algo especial, su madre, Ainha, hija de Medea, había hecho por Ulhä más que cualquier otro ser que haya atravesado nuestra esfera jamás, sin embargo, Blue, inconsciente de los hechos, pasó su infancia entre nosotros como una más hasta que pasados los años llegó la noticia de la desaparición de Ainha y de sus otros hermanos. En ese momento el hijo de su...quien ya sabes bajó a por Blue y se la llevó, desde entonces no he vuelto a verla, a saber qué milongas le contaría, pondría mi mano sobre esta hoguera a que él fue el causante de todo, lo sé...

- ¿Y Blue dónde está ahora?

Por lo que he podido saber gracias a un buen amigo mio, conocedor de cantares y caminos de este mundo y de otros cientos más, fue desterrada, y tras obligarla a deshacerse de sus alas y a cortarse su dorada melena, fue condenada a vivir en un cuerpo mil veces más frágil a unas 8 o 9 esferas de Ulhä sirviendo a esos seres tan estrafalarios que habitan en un planeta llamado Tierra...

-¡Ah! ¡si! lo he estudiado en el cole, aunque no se por qué lo llaman así si la mayoría de su superficie está poblada por agua...

Lo habitan unos seres muy extraños como bien te he dicho, otro día te hablaré de ellos...¿sabes que sienten eso que dicen dolor? Pues bien, parece ser que Blue está allí con la esperanza de que la dejen volver algún día si cumple bien su trabajo...guiar por el buen camino a esos humanos no es tarea fácil, son más retorcidos que tus regalices y más testarudos que yo jajaja ¿puedes imaginártelo? pero poniendonos serios...
Por otro lado sus hermanos Ziën y Zùrie han ido en su busca recientemente pero al no disponer de cuerpo libre no tienen poder alguno para moverse por la esfera...y yo ya no puedo hacer mucho, los eones pesan en la espalda lo creas o no...

-¡Yo iré por ella! y ¡la traeré de vuelta!

Tú en cuanto llegues a tu casa a la cama, niño insolente.

-¡No! iré a por mi espada y la traeré, yo solo puedo con un cuatrillón de esos humanos.

Creo que dejaré de contarte tantos cuentos de caballeros...

- ¡Iré! servirá de exámen, si consigo traerla habré terminado con todo esto y mi madre estará por fin orgullosa de mi y me comprará la bici que quiero.

Para qué quieres una bici pudiendo volar zopenco...en fin...muy bien, tú lo has querido, te convertiré en gato.

-¿¡Qué?!

No pretenderás aparecer allí así tal cual por arte de magia y con tu aspecto...

-¿¡Qué le pasa a mi aspecto?! que no me haya peinado esta mañana no significa que...

Digamos que...no somos lo habitual allí, lo mismo te toman por qué se yo...y la liamos...asi que...¡gato!

- Déjate de tonterías viejo...cogeré dinero porque a saber cuánto tiempo se tarda en llegar allí y algo de... ¡ni se te ocurra viejo loco! ¡no me jod...!

Us'dum'nilè

Muy bien misifú, tan solo te he contado la mitad de la historia, pero veo que tienes agallas y ganas de aventura asi que tu misión será cuidar de mi pequeña hasta que consiga ya sea o no por sus propios medios regresar a casa. Cuando llegues pregunta por Ayle y...ten mucho cuidado.

- ¿miau?



jueves, 25 de marzo de 2010

Por la libertad en la red.


Ante la inclusión en el Anteproyecto de Ley de Economía sostenible de modificaciones legislativas que afectan al libre ejercicio de las libertades de expresión, información y el derecho de acceso a la cultura a través de Internet, los periodistas, bloggers, usuarios, profesionales y creadores de internet manifestamos nuestra firme oposición al proyecto, y declaramos que:

1. Los derechos de autor no pueden situarse por encima de los derechos fundamentales de los ciudadanos, como el derecho a la privacidad, a la seguridad, a la presunción de inocencia, a la tutela judicial efectiva y a la libertad de expresión.
2. La suspensión de derechos fundamentales es y debe seguir siendo competencia exclusiva del poder judicial. Ni un cierre sin sentencia. Este anteproyecto, en contra de lo establecido en el artículo 20.5 de la Constitución, pone en manos de un órgano no judicial -un organismo dependiente del ministerio de Cultura-, la potestad de impedir a los ciudadanos españoles el acceso a cualquier página web.
3. La nueva legislación creará inseguridad jurídica en todo el sector tecnológico español, perjudicando uno de los pocos campos de desarrollo y futuro de nuestra economía, entorpeciendo la creación de empresas, introduciendo trabas a la libre competencia y ralentizando su proyección internacional.
4. La nueva legislación propuesta amenaza a los nuevos creadores y entorpece la creación cultural. Con Internet y los sucesivos avances tecnológicos se ha democratizado extraordinariamente la creación y emisión de contenidos de todo tipo, que ya no provienen prevalentemente de las industrias culturales tradicionales, sino de multitud de fuentes diferentes.
5. Los autores, como todos los trabajadores, tienen derecho a vivir de su trabajo con nuevas ideas creativas, modelos de negocio y actividades asociadas a sus creaciones. Intentar sostener con cambios legislativos a una industria obsoleta que no sabe adaptarse a este nuevo entorno no es ni justo ni realista. Si su modelo de negocio se basaba en el control de las copias de las obras y en Internet no es posible sin vulnerar derechos fundamentales, deberían buscar otro modelo.
6. Consideramos que las industrias culturales necesitan para sobrevivir alternativas modernas, eficaces, creíbles y asequibles y que se adecuen a los nuevos usos sociales, en lugar de limitaciones tan desproporcionadas como ineficaces para el fin que dicen perseguir.
7. Internet debe funcionar de forma libre y sin interferencias políticas auspiciadas por sectores que pretenden perpetuar obsoletos modelos de negocio e imposibilitar que el saber humano siga siendo libre.
8. Exigimos que el Gobierno garantice por ley la neutralidad de la Red, en España ante cualquier presión que pueda producirse, como marco para el desarrollo de una economía sostenible y realista de cara al futuro.
9. Proponemos una verdadera reforma del derecho de propiedad intelectual orientada a su fin: devolver a la sociedad el conocimiento, promover el dominio público y limitar los abusos de las entidades gestoras.
10. En democracia las leyes y sus modificaciones deben aprobarse tras el oportuno debate público y habiendo consultado previamente a todas las partes implicadas. No es de recibo que se realicen cambios legislativos que afectan a derechos fundamentales en una ley no orgánica y que versa sobre otra materia.

Este manifiesto, elaborado de forma conjunta por varios autores, es de todos y de ninguno. Se ha publicado en multitud de sitios web. Si estás de acuerdo y quieres sumarte a él, difúndelo por Internet.

http://wiki.manifiestointernet.org/wiki/P%C3%A1gina_Principal

sábado, 6 de marzo de 2010

παs, παsα, παν


Tendida entre los estrechos troncos rojizos a la luz de la luna menguante, mi mente luchaba por dar orden a la inmensidad de imágenes que mis neuronas conectaban y dejaban volar a una velocidad incomprensible para ojo humano.
Lo nenúfares relucían violetas e inflamados bajo los rayos de luna, cuya luz se perdía en las profundidades del estanque infinto.

Mis dedos tendidos y subordinados frente a una gravidez mística acariciaban la cristalina superficie de sus aguas mientras mis músculos parecían caer en un sueño profundo...y...mi mente luchaba por escapar, no era mi mente, era yo luchando por escapar de este cuerpo pesado para así poder llegar donde un pedazo de carne no te permite llegar, volver...mi ente luchaba por salir y correr...entre aquellos estrechos troncos ahora enrojecidos por la sangre de los que ya no están...corre...corre.....CORRE! y no te detengas! respira...ah....Paralda...déjame correr sobre ti...tiñe mis alas del color sin color, del color puro de la luz...

Las gotitas de agua aguantaban suspensas sobre las pocas hojas que quedaban en los altos...ah...Nicksa...aclara mi rostro y humedece de nuevo mis ojos para que puedan volver a cerrarse maravillados por tu belleza...Ghob, despierta y resurge de tus cenizas, de ti venimos y a ti volveremos si así lo deseas...me uno a ti con una última esperanza en esta lucha, te cedo mi cuerpo, te cedo lo poco que queda de la esencia que creaste para mí, para que puedas compartir tu sufrimiento, el dolor que te hemos causado desde el nacimiento de nuestra especie...derramaremos para ti tanta o más sangre que la que te hemos hecho sangrar, beberás de mis manos y volverás a ser la que eras...

- Aún sueño todas las noches con sus lobos, con sus caballos salvajes, con esas praderas interminables. Los vientos inquietos más allá de las cimas de las montañas.
La salvaje frontera de mis familiares y amigos. La bendita tierra de Ulhulhar...aún creo en todas las noches, en todos los días...soy como el caribú, y tú eres como los lobos que me hacen aún más fuerte. Nosotros nunca te debimos nada. Nuestra única deuda es una vida para nuestra Madre...es un buen día para cantar esta canción...para Ella. Su espíritu ha estado aquí mucho antes que tú, mucho antes que nosotros y mucho tiempo más lo estará después de que nuestro orgullo nos lleve a nuestro fin. Han vuelto Zurie, Ziën (cuando le da la gana...y siempre que no fastidie) y está Ayle fortaleciendose poco a poco...¿qué dices hermano?

-De verdad crees que merece la pena derramar más sangre...

- Tserof, de verdad crees que puedes soportar más que violen y desangren a Madre ante nuestra absorta mirada...¿crees que puedes aguantar más ahí parado sin hacer nada? dime, ¿de verdad lo crees?

- ...-sus ojos se tornaron de un rojo más ardiente que el rey celeste -empuña esa puta espada, afílala con las huesos de aquellos y limpiala con su sangre coagulada.

- Sabía que no nos fallarías hermano, pero vaya, no te reconozco, te has vuelto incluso más sangriento que Zurie...tú el señor de la paz y la tranquilidad...

- Ghob Tserof du αίμα me llaman ahora...el tiempo y las circunstancias me han cambiado mucho...hacía mucho que no nos veíamos Blue, te he echado de menos no voy a negarlo. Los espíritus del bosque no han cesado de mecer entre susurros tu nombre todos estos años...Blue...algún día te dejarán volver a casa, ya lo verás, por el momento cuenta conmigo, dame unas pocas semanas para organizarlo todo, el mejor ejército que hayas visto jamás, pequeño en número, inmenso en espíritu, de espíritu infinito, y lucharemos, ya lo creo que lucharemos...ahora corre! ¡antes de que Ayle despierte y no te encuentre! ¡muy pronto nos veremos hermana! ¡παs, παsα, παν!

- ¡παs, παsα, παν Tserof!

Corría, corría nuevamente entre las frondosas copas de los altos verdes, azules, ¡violetas! pisando descalza los musgos humedecidos por la lluvia que caía incesante a través de los rayos de sol que se perdían en las profundidades del bosque de Ulhulhar y se estrellaban en mi rostro, la guerra acababa de comenzar.

martes, 2 de marzo de 2010

Landa ò Zuriée


Voy a presentaros a cierto ente, organismo, ser, como queráis llamarlo, a excepción de persona, pues carece de alma...ahora que tengo aquí su ficha...(¡bendito el día que me puse a organizar los archivos!), aunque por lo que decían, tenía un alma tan grande que se salía de su propio contenedor y podía verse resplandecer entre las sombras de las callejuelas en las noches de conxuros. Tanta esencia y tan poco cuerpo, tanta alma y tan vacía...así era ella, la que guardaba las noches por mi, la que no temía al fuego, ella era el fuego, no temía al mar, ella movía las olas, y mucho menos temía a los inútiles de Gera, ese planeta minúsculo de ahí abajo en el que aún me pregunto cómo puede caber tanto engendro descabezado e inservible. Land(á)rzury de Irulea, Zurie...tántos nombres tuvo para venir a significar lo mismo.

Siempre aparecía en el momento preciso, cuando algo estaba a punto de ocurrir o cuando nada ocurría, nada...nada sería un buen calificativo para sus ojos, tristes ópalos apagados que derretían el metal más duro hasta ahora conocido con tan solo una mirada. Los ojos son el espejo del alma solía decirme y los suyos me provocaban tremendos escalofríos cuando los contemplaba en el espejo o en los charcos los días de lluvia, ¡ella hacía llover! ¡ella hacía gritar de placer a las inexpertas hojitas florecientes de los altos árboles! ¡hacía que las aguas se apartasen de su lado por miedo a electrocutarse con su piel! ¡hacía añicos con sus propias manos el corazón de quien osase dirigirle la palabra! ella no hablaba...susurraba al viento...a través de Kelpie. No recuerdo bien como llegó a nuestras manos, solo se que había pasado por tantas...había sido acariciada tantas veces que en ocasiones rechinaba al no presionarla bien, a pesar de todo, sus llavecitas oxidadas seguía duras como el primer día y emitían un sonido más eterno y místico que la luz que desprendía el celeste en noches oscuras como la de hoy...hará unos tres años...

- Hace unos tres años estabas dormitando frente a la pantalla de un ordenador más viejo que yo en un ciber dejado de la mano de dios a las cinco y pico de la tarde, a casi 40 grados a la sombra, escuchando la misma canción una y otra vez, y yo en la ventana mirando, como ahora...

-¡La madre que te parió!

-La misma que la tuya.

-Joder no vuelvas a hacer eso, maldita niñata...

-Perdón no era mi intención...-se reía por lo bajito.

-No importa...precisamente estaba ordenando esto y...

-Si, lo sé, trae - le quita la ficha, su ficha.

-¿Qué demonios vas a hacer? ¿¡eh!? ¡Zurie!

-Lo que debí haber hecho hace tiempo - prendió la ficha que en segundos se desisntegró dejando una mota de ceniza sobre su larga falda que, a continuación sacudió sin inmutarse.

- Pero...pero...¿se puede saber a qué has venido?

-¿No es obvio?- y se aproximó lentamente a ella-he venido a por lo que es mio, he venido a borrar todo lo que he sido para volver a ser, he venido...

Mientras pasaba su mano por el frío rostro de Ayle, ésta se ruborizaba, su mano iba bajando...

- Yo...Zurie no...para...no...no sigas...

-Déjame...déjame entrar de nuevo, déjame formar parte como antes...sé que quieres, vamos, sé que quieres hacer gritar a los árboles, sé que quieres correr por los callejones y quedarte dormirda junto a los gatos de Ulhuhar bajo una manta seca de hojas, sé que quieres volver a hacer el amor con la luna todas las noches y jugar con el sol al amanecer, sé que quieres volver a oir aquella melodía...

-...yo...para...no...nnn...ah...

- Está bien, me quedaré contigo esta noche y mañana me darás una respuesta ¿te parece?

-...pero...

-Shhhh...ya lo he decidido yo, ahora solo escucha - comenzó a tocar a Kelpie -quieras o no, he vuelto a casa deberías alegrarte ¡maldita sea! me dejarás...si o si...

-...pero yo...

Sin querer volvía a sentir aquello al escuchar de nuevo esa flauta que escuchaba a diario, zumbándome en las sienes, pero no tocada por quien lo hizo en su día y hoy volvía a hacerlo...sin querer me quedé dormida...y...quien sabe lo que haría la pequeña endiablada mientras yo navegaba por los mares de Morfeo...no volví a verla, ni siquiera se despidió...solo sé que ahora oigo esa maldita música como el primer día y que la luna está llamándome desde la ventana.


viernes, 19 de febrero de 2010

47º 35' 68''


Desde los acantilados de Calisto...

- Creo vislumbrar la ciudadela a lo lejos...¿es posible que...? ¿Tú qué dices Ziën?
- Yo solo veo negro en más negro, oscuridad sobre sombras proyectadas por la noche sin luna...
- Vale, no sigas, ya conozco tus discursitos.
- No veo nada, no veo Aina y nunca la veré, ¡nunca la veremos! por mucho que te arruines comprando lupas para el telescopio y te pases las noches apuntando coordenadas en tus sucios cuadernos...¡Blue! ¿me estás escuchando? ¡ríndete de una maldita vez y vámonos a casa!
- A casa...
- Si a casa, a Ayleszury, a nuestro apartamento, debe estar lleno de polvo, desde que no pisamos por allí...
-Unos meses...no más...
-"Unos meses no más" (repite haciendo burla) estoy harto de tu cabezonería y tus sueños imposibles, pero esta vez no, no me voy sin ti.
- Pero parece...mira, 47º 35' 68'' cerca de Miranda, a la izquiera de Ariel...
-Mira yo lo único que veo son un montón de puntitos con formas raras y lo que parece ¿Neptuno?
-...Urano...
-Urano, Neptuno...¿qué más da? vámonos a casa.
- ...
- Venga, recoge todo esto y vámonos.
-...
-¿Blue? ¿me estás oyendo?
-...me...me está hablando...
- ¿qué?
- que me está hablando...¡Alcánzame ese papel y ese lápid! ¡rápido!
Ziën coge el material.
-¿¡Pero estás chalada?! ¿te está hablando una estrella? ya es el colmo, ¿ves normal que tengamos que aguantar siempre tus bobadas de niña pequeña?...qué será lo siguiente...te...

Blue, nada más terminar de escribir, muestra el papel a su hermano. Está lleno de garabatos rápido e incomprensibles...parece cirílico...Blue comienza a recitar:

-Φαίνεται σαν οι θεοί,
ότι άνθρωπος καθισμένος απέναντι από εσάς,
από την πλευρά σας,
ακούω υπέροχη γλυκιά φωνή σας και σας γελάσω ...
Έχει μετατραπεί η καρδιά στο στήθος,
Κοιτάζω μόνο και μόνο επειδή δεν μπορώ να μιλήσω.
αλλά η γλώσσα μου είναι κατεψυγμένα,
φως φωτιά τρέχει κάτω από το δέρμα μου
τίποτα δεν μπορεί να δει τα μάτια μου,
Αυτιά μου ήταν κλήσης,

-Blue! qué cojones?...

ιδρώτας με καλύπτει,
Έχω όλα τρόμος,
Είμαι χλωμότερα από χόρτο
και νομίζω ότι είμαι κοντά στο θάνατο
Και όμως, θέλω να πεθάνω στην αγκαλιά σου....
είστε Aina μου, είσαι το όνειρό μου, είσαι το σπίτι μου.


-¿Se puede saber qué es todo eso?
- ...
-¿y bien?
-...dice...Me parece semejante a los dioses,
ese hombre que sentado frente a ti,
a tu lado,
escucha tu dulce voz y tu risa adorable...

Me ha dado un vuelco el corazón dentro del pecho,
apenas te miro, ya no me es posible hablar.
sino que mi lengua se hiela,
un leve fuego me corre bajo la piel
nada pueden ver mis ojos,
me zumban los oidos,
me cubre el sudor,
un temblor me posee toda,
me siento más pálida que la hierba
y me parece que estoy cerca de morir,
y aún así, quiero morir entre tus brazos...
tú eres mi Aina, tú eres mi sueño, tú eres mi hogar...
-Ah...
-...como no...
-¿qué?
-...no me he dado cuenta antes...
-¿de qué estas hablando? ¿quien ha dicho todo eso?
- Yo, es decir...yo he dicho eso...a través de ella...tú...soy yo...somos nosotros...Ayle...
- Ehm...no...
-...está aquí, en el corazón de Ayle, en el mío y en el tuyo...Aina...
-Estás insinuando que...
- (asiente)
-Jajajajajajaja vamos Blue tienes que dormir...esta niña...qué cosas tiene...vámonos...
-¿Por qué no quieres verlo? ¿por qué te niegas a ello? lo tienes ante tus narices, !lo tienes en tí! en nosotros, está aquí dentro...¡y tú lo sabías! ¿por qué no me dejabas verlo? ¡¿por qué?!
- Porque si se iba o le dejabas marchar...sabrías que habrías perdido todo, tus sueños, que todo tu camino habría sido en valde...que ya no encontrarías Aina jamás...cuando ya lo has encontrado sin saberlo...y habrías acabado igual que yo...
-Pero yo...yo...Ziën
-Tú la amas, yo la sufro...
-Ziën...
-Bien, ya lo sabes...no la dejes marchar...yo vuelvo a Ayleszury, alguien tiene que limpiar un poco el polvo...tú quédate en Aina...y no caigas en el mismo error que yo...adios Blue.

Besa a su hermana tiernamente en la frente y se marcha una vez más.

-...Ziën...entonces...ya no necesitaré esto (ofreciéndole el telescopio)
-Quédatelo...así podrás mirar en las noches frías y buscarme...si es que me necesitas...solo tienes que mirar hacia el cielo...como haces siempre...


"Tú eres mi Aina, tú eres mi sueño, tú eres mi hogar"

martes, 16 de febrero de 2010

Burning Witches






Reposaba Ayle entre las camomilas escarchadas por la nieve de sus pensamientos mientras Blue vagaba sin rumbo más allá de las hojas del anciano árbol donde se recostaba. Hacía un rato que no soplaba el viento, hacía...eones que no soplaba el viento. Seguramente habría muerto aplastado por su propia cordura o se habría ido a soplar a cualquier oido ajeno esas palabras enreversadas y sin pies ni cabeza que tantas veces había conseguido dar sentido.

El viento había estado contaminado y corrompido durante todo este tiempo. Los susurros que le habían animado a tomar ese camino habían estado nublados por una voz extraña, la voz que controlaba a todos menos a ella...sus oidos no captaban nada más que aquello a lo que los de ahí abajo llamaban música. Se sentía mal, triste por no poder oir aquella voz a la que todos veneraban, aquella voz que movía tierra y aire...tardó mucho en darse cuenta que tan solo era eso, una voz, una jodida voz que pronto se encargaría de callar de una patada en la boca.

- Ayle...Ayle mueve el culo! joder un día de estos me voy a largar para no volver y te vas a quedar ahí como el pedazo de carne innerte que eres!

- Vete a dar un paseo y déjame en paz, en paz...no quiero pensar, no quiero preocuparme de nada aunque sea durante un par de minutos...

-Ahí te quedas, me voy a Azra a arrancar tallos verdes recién plantados y a quemar brujas como...

Ayle rió sin querer con el poco plasma que quedaba en su centro antes de quedarse como lo que era...un pedazo de carne innerte...

No tardó mucho en llegar, Azra era un lugar, eso era, una porción de espacio perdido en la nada y rodeado de un vacío eterno, casi costaba respirar más ya no le suponía un problema pues no tenía que cargar con el estúpido cuerpo y sus estúpidos órganos degenerativos.

Su rostro era sumamente neutral, no la delataba como nunca lo había hecho, había tenido algunos momentos de debilidad, mas cuando parecía haberse dado por vencida, había caminado, y la luna sobre sus hombros, pequeñas gotas aladas se desacían en pedazos al contacto con la realidad gracias al simple proceso de condensación (¿De donde venía esa maldita niebla?) Miró hacia arriba y vio el infierno, y no dudó un segundo en bajar (más bien subir) y tomar en su mano cualquier alma de las que purulaban por el Hades como solía hacer para entablar conversación y evadirse, pero esta vez no escogió un alma cualquiera, había subido al mismisimo infierno para dejar las cosas claras.

-¡Arriba esos puños!
-¿Pero qué cojones?
-¡Vamos!
-Pero...
-¡Venga hostias! no he venido hasta aquí para nada, vas a arder de verdad y fíjate, no te va a hacer falta pasear más por el quinque inferno...
-¡Brujas! ¡Brujas!
-Bruja tu puta madre, ahora verás...
-¡Bruj...!*
-¡A tomar por culo tú, tu puto viento cálido y tus gilichorreces sobre la teoría de la "musica"! o como tu lo llamas...fortune and fame...Arde!!!

Y todo ardió, se quemó y quedó en el olvido...más el olor a chamusquina se quedó impregnado en su alma para que no olvidase por qué encendió esa cerilla...

Al rato bajó de nuevo para quedarse toda la noche velando sobre el cuerpo yaciente de Ayle.

"Cuando era joven, tenía sueños. Como todos, claro. Pero los míos casi los pude rozar. Primero soñaba con llegar lejos tocando la guitarra. Se me daba bien. Me hicieron dejarlo, lo "dejé" en cierto modo, pero ahora tengo muchos años para aprender a tocar los cojones".

lunes, 1 de febrero de 2010

White Room - Noite Meiga


Cuatro cuerdas sonaban empapelando la estancia, cuatro cuerdas acompañadas del calor seco y frío del fuego. Podría haberme pasado horas mirándo a ese espejo llameante mientras consumía otro de tantos libros. Leía al ritmo de la música que golpeaba en mi cabeza una y otra vez, y, por un instante, me transladaba a un lugar maravilloso, un lugar de esos que se describen en los cuentos y que solo existen en el corazón perdido de la selva amazónica.

Flores de colores brillantes colgaban de los árboles que cambatían entre ellos por crecer más y más. El aire húmedo y cargado mareaba, el agua caía gota a gota a través de las hojas y el sol apenas era visible entre la vegetación. A lo lejos se vislumbraba un claro muy amplio donde de forma cortante a la vista, el paisaje se tornaba azulón y fresco. Grandes robles se repartían a su gusto por el llano suelo esmeralda que reflejaba el celeste y donde tantas veces había jugado durante aquellos años en los que...ese lugar me resultaba demasiado familiar...sin duda...

Me dispuse a avanzar hacia el lugar en sí cuando de nuevo las ardientes plumas de fénix que calentaban la sala me extrageron de mi apasionante lectura.

Sin saber por qué, en un impulso tomé con fuerza el libro, procurando dejarlo abierto por la página por donde iba y lo arrojé a las llamas. Prendió en el instante y tras él, mi mano se introdujo sola, a pesar de que mi mente hacía lo posible por impedirlo, a pasar de página para comprobar si finalmente llegaba a ese lugar...

De pronto ambos, libro y lectora, desaparecieron en una llamarada azul.

Entonces es cuando sentí ese aire húmedo y cargado sobre mis sienes, esa mezcla de aroma a rosas, saúco, hinojo, torvisco y demás flores, el calor de una inmensa hoguera que se alzaba ante mi...y los altos robles de una de las infinitas colinas de Ulhä.

La sala quedó vacía y fría, más las cuerdas del roto violín siguieron sonando, esperando su regreso.

domingo, 17 de enero de 2010

Aynha


«Avanzo con paso decidido y firme. He dejado mucho atrás...todo, aquí, pero también he esperado mucho a que llegase el momento de regresar. Ya no soy lo que fui, antes las estrellas me acogían entre ellas y comentaban el secreto de la eterna juventud, ahora tan solo conservo esta falsa cara tras la cual los años se hacen notar en mis cansados ojos que han perdido gran parte de su color. Mis alas se caen a pedazos por momentos y mis cabellos se tiñen oscuros por tratar de ocultarlos a este mundo extraño que jamás conocerá la belleza de mi querida...»

Aihna, ciudad de calles encantadas. Allá en la lejanía se podría percibir su melodía acompañada de esa luz azul intenso que ha empapado mi cara cada mañana en aquellos días que no consigo recordar...Aihna, oh mi vida, cuánto tiempo ha espirado desde que no percibo el aroma enredado en tus cabellos, hojas que se mecen al viento que seca las lágrimas de los inmensos sauces llorones que guardan tu puerta.

- He visto mundo, he aprendido nuevas lenguas, he buscado aquello que no conocía, he soñado...estoy orgullosa de lo que he hecho, los días que he pasado...
-su cara bañada por un haz de juventud revelaba una edad no mayor a la veintena pero sus ojos adivinaban su verdadero ser- he visto cosas que no se pueden ver, cosas inimaginables de este mundo y de muchos otros, pero es ahora cuando siento que de verdad quiero volver...a casa...dime pues qué he de hacer o acabaré consumiéndome como hizo mi hermano...devorándome a mi misma en un mar de desesperación por intentar encontrar el origen de semejante abominación...

- Cuentan que hace eones y eones, en la ruinosa ciudad conocida ahora como Viandme los soles brillaron con el mayor fulgor, que el verde era color sobre color y que el agua corría por su sistema llevando cada gota de sabiduría a sus gentes. No era una ciudad, era un organismo vivo, respiraba y sentía como te siento ahora a ti. La luz era su mayor virtud y la salvaje melodía de flautas y violines tronaba en las noches en las que la luna deshacía su cama y se dejaba acariciar por las estrellas.
Sus habitantes, seres codiciosos con la grandeza que poseían decidieron crear "algo" que protegiese por siempre su dicha de manos de aquellos que intentaban violar el corazón de la grandiosa Aihna, como la llamaban por aquel entonces. Para ello, cegados por la codicia y el deseo, abrieron a su amada en canal y tomaron un pedazo de su corazón a partir del cual os crearon a tí y a tu hermano Ziën. No erais más que dos gotas de sangre azulada cuando nacisteis.

-Ziën...

-Llevados por la envidia lograron corromper a tu hermano llevándole al máximo kaos tras la creación de todos aquellos mundos que has podido conocer durante tu misión. En efecto, tras la desaparición de Ziën entre las sombras, te enviaron en su busca...hasta ahora. Tu marcha y con ello el abandono de la ciudad a manos de la locura hizo lo que ahora puedes ver, sin embargo escritos dicen que tras la extracción del corazón de Aihna se conservó un pedazo que sobró y que se conserva vivo en algún lugar del cosmos, la perdida y resplandeciente ciudad sin nombre...
El resto del alma de la metrópolis ha desaparecido por completo como puedes ver...mi niña -dijo acariciando su frío rostro- ya sabes el principio, ahora parte y trae contigo la continuación, nunca el final pues ni yo se si todo esto terminará algún día...sigue buscando a tu hermano y haz brillar de nuevo aquella a quien tanto amas y cura de odio y oscuridad a todo aquel desdichado ser que se cruce en tu camino y ante todo...

Aydan era jóven y apuesto, de largos cabellos plateados y con un rostro afable y alegre pero la sabiduría reflejada en sus ojos hacía estremecer a cualquiera. Había visto y oido más que nadie en cualquier esquina de este maldito lugar y me había costado la vida dar con él, sin embargo apenas le dejé terminar, ya había salido por la puerta con la sangre coagulada de odio y la chupa en la mano.

-
Oh Mother Moon, illuminate my return 'cause the road I took is so obscure...

viernes, 8 de enero de 2010

Cuentos


Despertó recostada sobre la áspera corteza del árbol, pequeños trazos de luz ya asomaban por la línea del horizonte apuñalando las nubes rosadas que se desvestían en la noche. Mientras se disipaba la neblina purpúrea, se escuchaba al árbol entonar.

Alzó la vista y pudo distinguir a un pequeño ser entre las verdes hojas. Música en mano, voz en boca y ojos de almizcle. Encinè, trovador de ciudad, con su flauta sonsoneaba su lamento y su quejido...

Oh...Oh..oh...oh..
oh...oh...oh...

Había un tiempo,
tiempo de leyendas,
Lejanas tierras ideadas…
Luchaban héroes, rescataban princesas
bajo su atenta mirada…

Contando cuentos del bosque
pasa la vida el triste juglar,
bailando duendes en la noche,
cuentan historias para recordar.

El tiempo las olvidó,
ya no hay sueños,
ni heroes, ni doncellas…
Pequeñas sombras escondidas
Que vigilan el cielo y la tierra.

Contando cuentos chinos
pasa la vida el señor,
moviendo marionetas desde su porche
echa las cuentas, recaudador.

El tiempo las olvidó,
ya no hay sueños,
ni heroes, ni doncellas…
Pequeñas sombras escondidas
Que vigilan el cielo y la tierra.

En un arranque sobre nuestras penas
nos enseñó a quemar las sombras,
nos contó de su buena época,
toda batalla perdida en la historia
ganada en la vida, soñada en la memoria.

Contando cuentos del bosque
pasa la vida el triste juglar,
bailando duendes en la noche,
cuentan historias para recordar.

Tras su cántiga descendió de lo alto para mostrarse frente a la jóven:

- Ya sabes, cuentos... ;3

De pronto una espada bañada en fuego azul cayó rozando su tenue pelo para caer a sus pies. El fuego se enredó en su pierna trepando a la desesperada. Intentó aullentarlo como si de un mal bicho se tratase hasta que Èncine lo pronunció: "Us'dum'nilè" y el fuego se tornó de un rojo intenso que se fue apagando hasta desaparecer por completo sin dejar rastro alguno.

- Ha empezado.¡Corre!

jueves, 7 de enero de 2010

El fuego se reflejaba en sus pupilas encendidas por la ira del que no conoce el perdón de la paciencia. Allí estaba justo en frente, aquella que tantas veces ha cambiado su voz y empañado sus ojos con tal de rellenar un poco más el mar de su orgullo. Traición. Aquella por la que tantas veces había dado la cara ahora le daba la espalda y a la vez atravesaba la espalda de Aile con su podrido mástil.

- ¿Y bien? ¿es que nunca vas a aprender la lección? después de tantas veces...¿tienen que darte de hostias para que bajes de las nubes?

- Pero...yo...si tú puedes hacer lo que quieras! mira aquí por ejemplo te acuerdas...

- ¡Para! deja de hacerte la víctima por

lunes, 4 de enero de 2010

Ulhä




Regresaba a casa, a su casa, a Ulhä...cada anochecer, para coger el sueño a través de sus mágicas sombras.

Tras andar durante todo el día dejó que la fuerza de la gravedad hiciese su labor a los pies de un tricentenario roble en medio de una de las purpúreas colinas del lugar. La noche comenzaba a teñir el techo del mundo mientras el viento cálido marchaba hasta la próspera mañana.

"Tal como vine, marcho a donde el lucero del alba me guie con su luz y calor, alla donde las estrellas no tienen cabida en el celeste"

La joven se recostó bajo la manta de estrellas, le dolía todo el cuerpo, amagullado, agotado tras un largo día de hacer un poco de nada por aquí y por allá.

"Yo arropare tus noches, y te proporcionare mi compañía, no menosprecies mis palabras ni tan siquiera mi grata compañía pues algun día oirás mi voz alejandose entre las tinieblas mientras ardes bajo el lucero."

En un instante se había cerrado del universo dejando volar su tortuosa mente. Solo pasaron unas horas, unos minutos, segundos...tan solo un instante quizas...cuando una dulce y alegre melodía hizo desaparecer la gracia de Morfeo.

Las hojas del viejo roble, las pocas que quedaban en lo más alto se movían alegremente al compas de aquella melodía a la desesperada de caer y servir de manto a la tierra que entre susurros las reclamaba.

La luna brillaba esa noche quizás como nunca había brillado, aquella luz intensa, cercano a un violeta profundo que solo los ojos de aquel que mirase con el corazón dormido podría percibir.

De nuevo sus tristes ópalos casi sellados se vieron interrumpidos por la alegre melodía pero antes de que pudiera hacer o decir palabra, frente a ella allí estaba, esos ojos violetas, mas oscuros y resplandecientes que la noche, ese cabello dorado arrancado de los mismisimos campos de trigo de Medea...allí estaba mirándola fijamente, clavando sus ojos en su corazón y haciendo vibrar su sangre manchada por sus venas.

-...aah...

- Shhh, ven. - dijo profanando los labios mas finos y rojos que jamás habia visto.

El muchacho de ojos morados cogió su mano y señaló la luna para que aquella voz dormida la mirase, aprendiese a amarla pues a partir de ahora iba a ser su única manta y refugio en su largo camino.

Comenzó a cantar...y antes de darse cuenta los 2 acababan de aparecer en lo que parecia una pequeña aldea. Una cálida hoguera reconfortaba el ambiente, mientras muejeres, hombres y niños iban de un lugar para otro. Unos cocinaban, otros se dedicaban a mirar...mientras sonaba aquella melodía y unos niños bailaban su desconcertante son bajo la luna violeta.

El jóven tiró de su brazo dolorido de cargar a su pálido compañero, que por cierto, ¿dónde estaba? le había dejado recostado y se había olvidado de él por completo...la estaba llamando pero ella tan sólo tenía oidos para aquella endemoniada melodía.

Tenía una extraña sensación, ya nada importaba, estaba rodeada de todo y nada, al socorro de una hoguera que calentaría hasta los carámbanos que tenía por manos y que su compañero se veía obligado a soportar. Estaba hipnotizada por la luz de aquella luna que no volvería a segar el celeste en mucho tiempo...y sus ojos se cruzaron en un haz de fuego provocado por el viento que azotaba la hoguera, el muchacho no se movía, era una situación bastante incómoda, ninguno hacía o decía nada, mas ¿acaso había algo que decir o hacer? fue entonces cuando miró realmente por primera vez esos ojos purpuras y la vió.

-Ev...v...a...

El orígen de todo aquel sueño, de aquella misteriosa melodía estaba ahí mismo, encerrada en esos ojos, suplicando que la liberasen. El beso duró un segundo de la eternidad y solo en ese espacio de tiempo pudo sentirla, mirarla directamente sin temor ninguno y tirar de su pequeña mano hacia ella.

...y sus ojos cegarían la visión de los hombres como si fueran el sol; y su beso, al alcanzarse, se retorcería acuchillando como el beso del relámpago...

Una parte de aquella visión purpúrea se había quedado incrustada en su pupila azul dispuesta a acariciar el mundo dentro de su nuevo instrumento musical.

Abrió los ojos y frente a ella seguía aquel muchacho, su pelo y sus labios parecían apagados y su rostro se había tornado más maduro, sin embargo, sus ojos brillaban más que la luz de la luna aquella noche.

-Ella ya se ha ido...ahora, regresa Ayle...volveremos a vernos.

La besó en la frente y la arrojó sin previo aviso a la ardiente hoguera. Todo ardió a su alrededor entre una nube de polvo morado.